La enviaron a un hospital psiquiátrico porque la policía no le creyó que era dueña de un BMW



Kamilah Brock rodaba con su elegante BMW por una calle de Nueva York cuando fue detenida por la policía. En realidad se encontraba bajo un semáforo, en espera de la luz verde. Mientras tanto, había soltado el timón y movía las manos en el aire al ritmo de una cadenciosa melodía.